¿Pueden los productos anticaída revertir la alopecia androgenética? La respuesta es que no, pero sí que pueden frenarla y conseguir que sus efectos sean algo más lentos. Si bien no existe un remedio conocido para este tipo de alopecia, se ha mejorado mucho en los tratamientos que trabajan en dos sentidos:
- Retrasar la muerte de la raíz del cabello y por tanto favorecer que este permanezca más tiempo. Se consigue así un retraso en la calvicie que se agradece.
- Fortalecer el pelo ya existente consiguiendo así que nazca más y el que sale resulte más grueso. De esta manera el cabello se verá más frondoso y se notarán menos las zonas ralas.
Pero, ¿qué tipo de productos son los más recomendables para este fin? Actualmente, contamos con tres: champús, lociones y nutricosméticos.
Los champús tratamiento
Uno de los métodos más populares para tratar la caída del cabello es el champú. Se trata de un producto de tratamiento que aporta vitaminas al pelo para tratar de prolongar la vida de su raíz. Entre sus ventajas está la sencillez de su aplicación ya que sustituye al jabón que se usaba normalmente.
Estos champús tienen una eficacia relativa y se recomienda que se utilicen como refuerzo de otros tratamientos y no como único método. Eso sí, muchos hombres que saben que van a heredar un problema de alopecia lo usan desde edades tempranas para retrasar al máximo el inicio de la caída.
Lociones para uso diario
Las lociones son otro de los remedios populares para la alopecia. Se aplican sin necesidad de lavar el cabello y se dejan actuar. En la mayor parte de los casos se usan a la noche, con un pequeño masaje para activar la circulación. Por la mañana se lava el cabello con el champú de tratamiento.
Estas lociones pueden ser las clásicas o las más modernas, concentradas en pequeñas dosis. Las actuales tienen la ventaja de que con una pequeña cantidad es suficiente y no engrasan el cabello, no siendo necesario lavarlo tras aplicarlas.
Alimentar el pelo desde el interior
Por último, nos encontramos con los productos de nutrición cosmética. No son medicamentos, pero al tomarlos se están consumiendo vitaminas y otros complejos que actúan sobre el cabello para fortalecerlo y estimular su crecimiento.
Son lo último en tratamientos contra la alopecia androgenética y ofrecen muy buenos resultados. Por eso, cada vez más personas los tienen como tratamiento base y utilizan champús y lociones como refuerzo para una mejor actuación.